miércoles, 30 de diciembre de 2009

InterMezzo FS

Asco de bar.

Aire espeso, gris azulado. Huele a humo rancio. En el centro del lugar, un ventilador de techo girando en cámara lenta. Whup… Whup… Whup…

Un chico. O no tanto, en dos millones de segundos tendrá edad suficiente para elegir sus propios implantes. Sentado cerca de la puerta mira hacia la calle sin ver, perdido en un pensamiento, no nota la gente pasar, y se dicta:

Me gustas cuando dices ¡báudios!
porque es como si ladraras…


— No, no, así no. Le falta algo.— Piensa, moviendo los labios como si pronunciara amablemente las palabras a la mesa que está frente a él.

$ man woman
No manual entry for woman.
$ _


— Hola. — Lo saluda su mejor amigo. — Redireccionaste tu posicionador. ¿Huyendo del preceptor?
— Sí— sorbe de un vaso involcable y traga— necesitaba estar solo.
— ¿Otra vez Canela IX?
— Mata ese pensamiento. Estoy harto de vuestros prejuicios. No saben lo que se siente.
— Aquí estoy. Transfiere.
— Dice que no acuso recibo, que filtro todo lo que a ella le sucede. Necesitaría Multivac cien veces para retener todo lo que me transfiere.
— Eso es fácil. Sincronizar con una fémina requiere sólo un índice invertido y apareo de patrones.— Replica, dándose un aire superior.
— Crees que exagero, no sabes la cantidad de información que es capaz de producir un ente así. En un día calmo satura todos mis implantes neurales. Y, lo peor, es libre de contexto, es capaz de retomar una conversación un millón de segundos después como si hubiera pasado sólo uno.
— Tampoco necesitas recordar todo lo que te dice, es un juego de espejos, usa cadenas de Markov sobre lo último que te dijo. Grado dos sobra para la mayoría de ellas. Cuatro sólo si es una premio Nobel. ¡Ja!— Rie.

310 | x `mod` 15 = fizzbuzz
320 | x `mod` 3 = fizz
330 | x `mod` 5 = buzz
335 | otherwise = show x


Pudrir diez veces



Un hombre acodado en la barra con un vaso de pseudovodka en una mano, agitando la otra mano en el aire.

— La historia del mundo. ¡Cough!— Tose.— Lugar paradisíaco.— Pausa.— Llega el hombre.— Pausa. — ¡JE-Jemmmm!— Se aclara la garganta.— El hombre destruye el paraíso para— extendiendo las vocales y pronunciando con voz socarrona— coonstruuiir un lugar más apto, más paradisíaco. Para él.— Agrega.

Apoya el vaso sobre la barra.

— El hombre, la naturaleza, el tiempo, TOOODOS— exagerando el énfasis en la palabra— destruyen lo construido.

Gira lentamente para regalarle una mirada de desprecio a cada rincón del lugar.

— Ruinas. Fin de la historia.

Y vuelve a empezar.

main = mapM_ (putStrLn . foldl fizz buzz) [1..100]


Reemplazo de carne enlatado


Una mesa alejada de la puerta, en el rincón más oscuro del lugar.

Pip-pip-piri-piiip

Dos adolescentes comparan implantes, beben sus refrescos de hipersoda a los que agregaron a escondidas un poco de absenta rebajada con alcohol metílico que le compraron a un conocido de un hermano mayor de uno de ellos, y comentan sus últimos hallazgos…

— … si sumas Ono-Sendai codificada en EBCDIC mas 4 en BCD empaquetado te da 333, que es un número medio diabólico.
— Y Sociedad Bavárica Trans-Oceánica en notación polaca inversa es igual al número atómico del azufre, algo que abunda en el infierno.
— No te digo, estos andan en algo raro.
— Sí, molaría trabajar allí.

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1 comentario:

  1. Acá es cuando Juan Carlos P. niega la autoría del chiste y pone como prueba el mismo post.

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